Te listamos los gastos de tu auto que te pueden ayudar al momento de hacer tu declaración de impuestos.
El sistema de calefacción de tu auto hace más que mantenerte caliente cuando el clima se torna frío, también proporciona calor para despejar el parabrisas, la ventana lateral y, a veces, los espejos exteriores en las mañanas heladas.
El uso de la calefacción, en algunos de los estados del país, es indisipensable para mantenerte cómodo y para conducir de forma segura a pesar de que consuma un poco más de combustible.
Para ser claros, este sistema consume un porcentaje del combustible. Aunque aprovecha el exceso de calor generado durante el funcionamiento del motor, por lo que la cantidad que requiere es mínima.
«El sistema de calefacción proporciona calor para despejar el parabrisas, la ventana lateral y, a veces, los espejos exteriores.»
La calefacción del auto necesita electricidad para funcionar, aquí es donde entra el uso de gasolina. Se envía una señal desde el sistema de calefacción al ventilador interno que comienza a girar. Esto permite que el aire caliente sea succionado desde el motor hacia el área de la cabina. La cabina se calentará cuando el motor esté a la temperatura de funcionamiento, lo suficiente para que funcione el sistema de calefacción. Aunque el consumo de gasolina sea menor, es importante seguir los siguientes consejos, para que este no se incremente.
- Revisa periódicamente tu auto para asegurarte de que tu vehículo funcione en las mejores condiciones.
- Espera que el motor se caliente. Arranca el auto para que el sistema no desgaste de forma prematura la batería. Una vez que el motor alcance su temperatura óptima, es momento de encender la calefacción. No tiene sentido arrancar el motor y encender inmediatamente la calefacción, ya que esto obliga al sistema a trabajar sin que el motor genere aún calor por sí mismo. Por lo que durante los primeros minutos, solo saldrá aire frío y forzarás el motor, incrementando el consumo de gasolina.
- Acelera suavemente. Evita acelerar a fondo y frenar demasiado rápido, así consumirás menos combustible.
- Elige la temperatura ideal. Al entrar al auto, sin importar cuanto frío sientas, nunca pongas la calefacción a tope. Lo más recomendable es seleccionar una temperatura intermedia y que el auto la vaya proporcionando.
- Apaga la recirculación. Para ahorrar gasolina cuando enciendes la calefacción del auto, lo ideal es apagar la recirculación de aire para que todo el flujo de aire del exterior llegue al radiador del coche con la mayor fuerza posible y así el aire caliente llegue antes a la cabina.
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